- Transportar una nevera con seguridad
Uno de los elementos que más impone transportar durante una mudanza es (junto con el sofá) la nevera.
Sí, la idea de cargar con un electrodoméstico que parece pesar varias toneladas, que es más alto que uno mismo y frágil como la porcelana, no aparenta ser un planazo.
Hoy vamos a contarte cómo transportar una nevera sin que ella o tú os averiéis por el camino.
Es decir, de forma segura y lo más cómoda posible.
- Prepara la nevera para la ocasión
Sí, será mucho más fácil de transportar la nevera si la engalanas como si de un gran evento se tratara.
Estos son los pasos que te recomendamos hacer antes de mover la nevera:
- Desenchufa el frigorífico al menos 6 horas antes del traslado, sobre todo si tu nevera no es no frost. Le dará tiempo a descongelar y evitará derrames de agua indeseados (una vez colocada en su nueva ubicación, también deberás dejarla reposar varias horas antes de enchufarla para que se asiente el líquido refrigerante).
- Vacía del todo la nevera. Como es lógico, pesará menos estando vacía, evitarás que las cosas empiecen a dar tumbos dentro de ella y que pueda estropearse algún alimento por el cambio de temperatura.
- Retira todos los accesorios extraíbles. Bandejas, cajones… aliviará algo el peso del aparato y evitarás posibles roturas (no está de más que las marques o numeres para saber cómo colocarlas de nuevo en su lugar después del traslado).
- Asegura los accesorios que no se puedan retirar. Puedes sujetarlos con cinta adhesiva.
- Recubre las esquinas y la puerta de la nevera con almohadillas, mantas o cartón. Ayudará a que no se dañe en caso de golpear o rozar algo sin querer.
- No uses cinta adhesiva en el exterior, ya que podría dañar el acabado si es un poco delicado.
- Cómo trasportar la nevera
Si estás pensando en atar la nevera al techo de tu coche porque la nueva vivienda está a unos pocos minutos de distancia…
No te lo recomendamos en absoluto.
La nevera debe trasportarse siempre en vertical porque contiene un compresor con líquido refrigerante que puede llegar a derramarse si lo tumbas.
Además, tu coche no está preparado para trasportar un aparato tan grande y pesado como un frigorífico.
Deberás hacerte con una furgoneta o camión con una altura suficiente como para poder colocar la nevera en vertical.
Es importante que puedas sujetar la nevera a las paredes del vehículo para que no se desplace durante el trayecto.
Hoy en día es fácil alquilar una furgoneta que pueda conducirse con el carnet tipo B (el que todos llevamos en la cartera, con el que podemos conducir un turismo).
Con estos vehículos tendrás la libertad de hacer el traslado a tu aire, pero te recomendamos que te hagas estas preguntas:
- ¿Tengo las habilidades necesarias para conducir y maniobrar con un vehículo grande?
- ¿Podré cargar la nevera con seguridad?
- ¿Estoy seguro de que conseguiré transportar la nevera sin dañarla o lesionarme?
Transporte profesional, la mejor alternativa
Para asegurarte de que tu nevera llega en perfectas condiciones (sin desperfectos y sin daños internos que puedan afectar a su rendimiento) la mejor opción siempre será contar con una empresa profesional especializada en el traslado de objetos voluminosos y delicados.
Una empresa profesional cuenta con el material y la experiencia necesarios para poder mover, así como cargar y descargar tus muebles y demás enseres sin que estos sufran daños.
Además, el traslado será más:
- Rápido
- Cómodo
- Seguro
Y menos traumático también
En Transporter nos encargamos a diario de los traslados más complejos y delicados, podemos a ayudarte a trasladar tu nevera, así como el resto de tus pertenencias.
Contacta con nosotros y pide tu presupuesto sin compromiso.
Tu nevera lo agradecerá, tu espalda más aún.
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